
Prof. Hugo Vicencio Reyes
EL
REINO DE DIOS MENTALIDAD POPULAR
La mentalidad popular en los tiempos de Jesús entendía el
Reino de Dios de una forma eminentemente política. Creían que el Reino de Dios
consistía en la liberación de la dominación de los romanos. Es por eso que
Jesucristo no utiliza el título de Mesías, por el hecho de que la expectación
mesiánica que existía en el pueblo judío estaba deformada, y podía prestarse a
confusiones. Para expresar su función mesiánica, Jesucristo se sirvió del
título "Hijo del Hombre", que no estaba tan "desgastado" o
“quemado” entre los judíos de su tiempo. Los evangelios recogen 82 ocasiones en
las que Jesucristo utiliza el título de "Hijo del Hombre". Esta
imagen está tomada del Antiguo Testamento (Daniel 7,9-14), y en ella la figura
del Hijo del Hombre está descrita con unas connotaciones divinas: es alguien
preexistente, proviene del cielo y aparece junto al "anciano" en
medio de una nube. ***
¿QUÉ ES EL REINO DE DIOS? El evangelista Marcos resume así la
predicación de Cristo: "El tiempo se
ha cumplido y el Reino de Dios está cerca, convertíos y creed en la buena
noticia". Por lo tanto, el mensaje central de la predicación de Cristo
es la llegada del Reino de Dios.
El Reino de Dios supone, en primer lugar, una
nueva idea de Dios que corrige las falsas concepciones que tenían los fariseos.
Es un Dios que ama a los hombres por encima de sus méritos, sin pedir a cambio
otra cosa que la conversión de los corazones y la sencillez de corazón. El
Reino de Dios no es algo exterior y visible, sino que viene sin sentirse; de
hecho ya está entre nosotros, está en nuestro interior. La primera dimensión
del Reino es el amor inmerecido con el que nos ama Dios Padre.
Pertenecer al
Reino es dejarse amar por un amor insospechado. El Reino de Dios no es más que
la misericordia de Dios Padre ofrecida ahora gratuitamente a todo hombre,
independientemente de todo mérito, lengua, raza, etc. Las parábolas de la
misericordia de Dios que encontramos en los evangelios son las que mejor
describen la esencia del Reino de Dios. Dios nos introduce en su intimidad de
manera que podemos vernos liberados de la fuerza que el pecado y la muerte
tienen en nosotros.
EL REINO Y LA LUCHA CONTRA TODA INJUSTICIA Pero,
el Reino de Dios no es una realidad meramente interiorista o espiritualista,
sino que implica una lucha contra toda injusticia de este mundo, dado que la
injusticia es pecado y fruto del pecado. Instaurar el Reino de Dios en este
mundo, no es limitarse a afirmar que Dios nos ama y está en nosotros, sino que
nos debe de impulsar a llevar esa presencia de Dios a todas las realidades de
la vida: el mundo laboral, la política, el deporte, la ecología, etc... En
definitiva, todo está implicado en el Reino de Dios. No se trata de negar a las
realidades de este mundo su propia autonomía, para que sean dirigidas desde la
Iglesia. No es eso. Baste recordar que, tras el episodio de la multiplicación
de los panes, Cristo huyó cuando quisieron proclamarle rey. De lo que se trata
es de que los cristianos tomemos conciencia de que nada de lo que ocurre en
este mundo es ajeno a Dios y de que los valores del Reino de Dios nos impulsan
a construir una sociedad más conforme con los valores evangélicos.
*** PROPUESTA DE TRABAJO
+1- ¿Cómo pueden hacer presente los cristianos el Reino de Dios en el mundo actual?
2¿Crees que los católicos debemos procurar que la política sea inspirada por el
Evangelio, o piensas que son dos cosas que no tienen nada que ver?
3¿Crees que la
tarea de instauración del Reino de Dios en este mundo la debemos de hacer
individualmente, cada cristiano en su ambiente o, por el contrario, piensas que
es más conveniente que, nos asociemos para llevar a cabo proyectos
socio-culturales de inspiración cristiana?
UN REINO NO CONSUMADO No podemos caer en el error de
pensar que el Reino de Dios se realizará plenamente en este mundo y en esta
vida. El Reino de Dios ya ha llegado, y a él pertenece todo el que se convierte
a Cristo. Sin embargo, no ha sido todavía consumado; solo lo será cuando el mal
sea vencido definitivamente en el retorno de Cristo al final de los tiempos.
Esto quiere decir que tendremos que llevar adelante el Reino de Dios con
paciencia, en medio de injusticias que no acabamos de vencer.
En tiempos de
Cristo algunos se escandalizaron porque no podían aceptar que las legiones
romanas siguiesen allí, tras la instauración del Reino de Dios proclamada por
Cristo. Jesús hizo muchos signos milagrosos entre los necesitados de su tiempo,
pero otros muchos no fueron curados. Hoy también ocurre que algunos se
escandalizan de que la Iglesia proclame que Dios nos ama y que está con
nosotros; cuando hay tantas injusticias en el mundo. Se preguntan cómo puede
permitir Dios tanta desgracia. Otros, sin embargo, son conscientes de que la
plenitud del Reino de Dios solo tendrá lugar en la parusía; y, mientras tanto,
no pierden el tiempo en estériles lamentos, sino que se entregan y luchan por
instaurar el Reino de Dios, en la medida de lo posible.
*** PROPUESTA DE TRABAJO dos personas. +1 Lee y comenta Rom 8,18-25.
2+ Comenta en clave de lo que hemos explicado el
texto siguiente (Mt 11,2-6): "Juan que había oído hablar en la cárcel de
las obras del Mesías, envió a sus discípulos a preguntarle: -¿Eres tú el que ha
de venir o tenemos que esperar a otro?. Jesús les respondió: -Id a contar a
Juan lo que estáis viendo y oyendo: los ciegos ven, los cojos andan, los
leprosos quedan limpios,... y a los pobres se les anuncia la buena noticia. ¡Y
dichoso el que no se sienta defraudado por mí!"
+
Es claro que la instauración del Reino de Dios lleva
consigo una sociedad más desarrollada y más justa, pero no parece que todo
logro en lo social se identifique con la llegada del Reino de Dios, sin más
matizaciones. Tengamos en cuenta que cabe conseguir ciertos avances en materia
de justicia social, estando en pecado y al margen de Dios. Por ejemplo, ¿crees
que en países desarrollados como Suecia o Noruega el Reino de Dios está más
instaurado que en África? + Jesús promete el Reino de Dios especialmente a los
pobres y a los sencillos.
. LA
PROVIDENCIA DIVINA Existe el riesgo de pensar en el Reino de Dios como un mero
conjunto de valores éticos por los que tenemos que luchar. Pero lo principal
del Reino de Dios es que nuestro Padre Dios nos conoce y nos ama a cada uno de
una forma personal e intransferible. No solo eso; sino que además Dios tiene un
designio de amor para cada uno de nosotros, el cual que estamos llamados a
descubrir. Y más aún, Dios cuida de nosotros en todo momento, incluso en medio
de las pruebas más adversas; llegando a hacer el gran milagro de convertir en “bienes”
los “males”. Un cristiano es alguien que confía en la providencia de Dios,
aunque no llegue a entenderla plenamente. Es consciente de que el Reino de Dios
sigue extendiéndose, al tiempo que la providencia de Dios cuida de él y de
todos, día y noche, a las duras y a las maduras.
Documento de
trabajo tomado de José Ignacio Munilla
En tu cuaderno
responde individualmente.
Actividad 1.-
Actividad 2
Actividad 3 ¿Creen que en Chile actual, se están viviendo
los valores del Reino?
¿Por qué si, porque no?: Justifiquen sus respuestas